La herencia que recibimos

18 Dic 2018 lectura de 3 minutos
La herencia que recibimos

Los seres humanos venimos al mundo con una serie de información que tenemos almacenada en los genes. Aquí podemos encontrar todo tipo cuestiones, desde el color de nuestro pelo, la estatura, pero también historias vividas en la familia, traumas, emociones sentidas por algún miembro del clan, heridas y secretos ocurridos en generaciones anteriores.

Muchas veces no somos realmente conscientes de todo lo que almacenamos en nuestro interior. Vivimos y revivimos patrones de comportamiento que no sabemos de dónde vienen y pensamos que son nuestros propios. Repetimos historias que no sabemos muy bien porque aparecen en la vida y que no comprendemos mucho. Tenemos comportamientos e ideas sobre nosotros mismos que tomamos como verdades absolutas. Pensamos que no podemos cambiar, “yo soy así” suele ser la frase favorita de mucha gente. Pero en realidad no, todos podemos cambiar si es que queremos hacerlo y tomamos conciencia de aquellas cuestiones que hemos heredado de nuestro clan familiar.

Para poder descubrir que traemos a este mundo que debemos tener presente, existe una forma diferente de analizar, tiene que ver con aprender a leer más allá de lo que podemos ver a simple vista. Para ello es fundamental empezar a analizar el sistema familiar en el que vivimos y ser capaces de hacer un ejercicio de introspección para sacar a la luz todo lo que está en el inconsciente de cada uno.

¿Has oído hablar en algún momento del Análisis Transgeneracional? Es una forma de mirar a nuestra familia de un modo diferente. Este recurso nos ayuda a tomar conciencia de muchas cuestiones acontecidas más o menos conscientemente en el clan familiar. Debemos tener presente las fechas de nacimiento, de fallecimiento, fechas importantes, los nombres... para crear un árbol genealógico que nos permita entender lo que nos está pasando en la vida.

Ejemplo de aplicación del Análisis Transgeneracional

Te pongo un ejemplo. Dentro de este tipo de análisis existe un rango de fechas importantes dónde descubrimos cuando fuimos concebidos. Imagina que esas fechas comprenden desde el 23 de Octubre al 11 de Noviembre. Yo sé que fui concebida durante esa temporada. Ahora imagina que uno de mis tíos maternos nació en ese mismo momento (aunque sea años atrás). Para mí ese tío es importante, cuando yo me fije en él, debo mirarle desde la óptica: ¿qué características, pensamientos y/o ideas tiene él que yo no tengo? Y todo aquello que yo descubra que él tiene y yo no, debo buscar la forma de incorporarlo en mi vida porque me va a hacer falta.

Así como este ejemplo se puede hacer con un montón de fechas, con patrones de comportamiento que seguimos haciendo del mismo modo e igual hay que dejar de hacerlo o reformularlo y adaptarlo al momento vital que estamos viviendo ahora.

A través de este análisis podemos entender enfermedades, lealtades familiares, por qué no podemos mantener relaciones sentimentales largas... o cualquier otra duda que tengamos.

A través de este análisis podemos entender enfermedades, lealtades familiares, por qué no podemos mantener relaciones sentimentales largas... o cualquier otra duda que tengamos.

En realidad desde esta óptica nos podemos venir al mundo o a seguir repitiendo los programas heredados o a repararlos.

¿Quieres descubrir más sobre ti y tu familiar?