Los resultados arrojados por el informe PISA, posicionan a nuestros estudiantes anclados en la mediocridad. Esta noticia ha provocado una especie de “alerta”, algo normal considerando que hablamos del futuro de los países. Pero ¿cuál es realmente el problema? ¿Poca capacidad de los alumnos o poca cualificación del profesorado?
No quito importancia al informe, pero me preocupa mucho más la cualificación de algunos profesionales de la Salud que, consciente o inconscientemente, por carecer de una buena formación o no contar con una formación continuada, están dañando la salud de sus pacientes.
La formación continuada de los profesionales de la Salud, debería ser obligatoria, pero quizás las “administraciones sanitarias” carezcan de presupuesto. Se recortan los presupuesto de sanidad, pero se pagan 21.000 euros, entre sueldo y gastos de viajes, a algunos políticos. Está meridianamente claro que la salud no es la prioridad de los políticos y de las instituciones sanitarias que nos representan.
Y me explico: son muchos los médicos, nutricionistas y otros profesionales de la Salud que aconsejan el aumento de la ingesta de vegetales, frutas y frutos secos, o dietas basadas en estos alimentos incluyendo los batidos verdes.
El haber sido ofendido, dañado, traicionado, calumniado, violentado, rechazado, excluido, etc. produce en el interior una carga pesada que actúa como una herida: el no-perdón. Esta herida en muchas ocasiones no termina de cerrarse y cuando se recibe un golpe en la vida, vuelve abrirse, y en muchas ocasiones con más fuerza.
Se puede abarcar la construcción y comprensión de la anatomía del perdón vs. no-perdón, como una manera cognitiva de entender, analizar cómo se forma la percepción e interpretación de las experiencias como causantes de estrés, enfermedad y muchas patologías/desajustes. Se ha comprobado que el estrés es causante de muchas enfermedades inmunodeficientes y de diversidad de trastornos de la salud física y psíquica. Un factor importante causantes de estrés es el conflicto de haber sido “heridos” y no saber/poder/cerrar perdonar.
El doctor de la Facultad de Medicina de la Universidad Federal Fluminense, José Genilson Ribeiro piensa que la enfermedad comienza en el alma, se instala en el cuerpo físico. Piensa que no es suficiente con tratar el efecto de la enfermedad, también es importante tratar los aspectos generales. Muchas personas tienen sentimientos heridos y no pueden perdonar. Esto los deja atrapados en su dolor, dificultando la mejora de la salud.
Kaplan, Munroe-Blum y Blazer sugieren que el perdón puede ser integrado en la literatura científica dentro del campo de estudio sobre estrés, afrontamiento y salud. Varios autores proponen que el perdón puede ser considerado una forma de afrontamiento del estrés con efectos beneficiosos sobre la salud (Prieto Ursúa, 2012).
Bebemos agua para hidratar nuestro cuerpo, mantenerlo flexible y desintoxicarlo. Lo que intentaré explicar a continuación es que esto en realidad ya no es posible con el agua que tenemos a nuestra disposición hoy en día. Esto se debe a que, desde hace unos 80 años, el agua que ingerimos ya no tiene vida y se ha convertido gradualmente en un producto en conserva.
El día 4 de Noviembre los servicios informativos de RTVE nos sorprendía con la noticia de que un cierto número de medicamentos, indicados para ciertas patologías leves y de venta en farmacia, habían sido analizados y los resultaron arrojaron “el efecto cero” lo que podría considerarse un delito de publicidad engañosa, “una estafa”.
Pero, esto no es preocupante, lo verdaderamente preocupante, son los cientos de medicamentos que están siendo expedidos y administrados con efectos secundarios que pueden causar la muerte.
A estos medicamentos también podemos sumar los tratamientos que, desde hace años como mínimo, han sido puestos en duda y enmarcados como ineficaces o con efectos nocivos para la salud.