Mi enfoque psicoterapéutico es integrativo. La enorme ventaja de esta orientación es que aprovecho lo mejor de cada enfoque terapéutico para trabajar a la persona, en función del tipo de necesidad. La mayoría de los psicólogos y/o terapeutas suelen trabajar desde una sola perspectiva, lo que limita en gran medida su trabajo, su versatilidad terapéutica y sobre todo, su eficacia.