Olga Valencia escribió:
Me parece genial tu respuesta,Ester y la comparto plenamente.
Sólo añadir que a mí no me gusta nada la fiesta del carnaval, ni disfrazarme ni salir a ver las carrozas en las que, por cierto, no hay ningún tipo de expresión personal porque se organizan por grupos y todos los componentes del grupo van exactamente igual.
Es una celebración que a mí no me motiva en absoluto, creo que porque ya estoy bien con lo que soy y no necesito aparentar nada.
Saludos
Hola Olga, yo la celebración del carnaval la asocio a los niños que hacen las celebraciones en sus colegios. Me gusta que para la ocasión puedan elegir el disfraz que quieran y experimenten con roles que van más allá de los que normalmente desempeñan. Los niños en su vivir con libertad hacen del carnaval una ocasión para probar nuevos caminos.
Saludos,
Andrea Navarrete (psicóloga en Paideia)