Los científicos D. Ángel María Villar y Dña. M.ª Emilia Carretero, mencionan en su trabajo los beneficios del aceite de hipérico en el tratamiento de la depresión “de leve a moderada”.
Confirman en su trabajo las cualidades del hipérico en cuanto a “propiedades antisépticas y cicatrizantes, por vía tópica, así como astringentes y antivirales, han sido demostradas en diversos ensayos experimentales tanto in vivo como in vitro y en ensayos clínicos. Posee también propiedades antinflamatorias, antiespasmódicas y diuréticas debido probablemente a la presencia de flavonoides”.
La hipericina y la Pseudohipericina son compuestos del hipérico cuyos efectos antivirales parecen ser de amplio espectro: influenza, herpes, polio, hepatitis C, VIH, etc. también sobre bacterias como la Helicobacter Pylori.
Respecto a la depresión, en otra parte de su ensayo declaran: “En los ensayos clínicos se destaca el porcentaje de mejoría de los pacientes, así como la disminución de efectos secundarios frente a los anti-depresivos habitualmente utilizados”.
Otros trabajos científicos que confirman lo mencionado anteriormente son:
El aceite de hipérico es en realidad un macerado de la hierba de San Juan o corazoncillo en aceite de oliva de primera prensada en frío, esta planta contiene una sustancia colorante del grupo de las flavonas que tiene el poder de teñir y colorear de rojo, por eso el macerado en aceite de oliva adquiere su característico color rubí. El nombre “hipérico” viene del griego. “Hiper” significa por encima y “eykon” significa imagen, la traducción es “por encima de todo lo imaginable”. Este término viene a ponderar la gran reputación terapeutica de esta planta medicinal, sus virtudes son casi milagrosas. La planta contiene alcohol cerílico, fitosterina, hidrocarburos cristalizados y sustancias tánicas. El aceite de hipérico elaborado alquímicamente es un producto que no debería faltar en la cabina de un quiromasajista o un profesional de la estética. También se puede recomendar en el hogar, sobre todo si hay niños o posibilidades de producirse heridas o quemaduras.
Tiene abundantes propiedades cosméticas, es un agente citofiláctico o regenerador de las células, sobre todo cuando las células han sido expuestas a una agresión, pues favorece la regeneración del revestimiento epidérmico y por ello se puede utilizar en cortes, quemaduras, golpes, en llagas de personas ancianas o enfermos inmovilizados. Sus propiedades desinfectantes, antibióticas y regenerantes lo convierten en un producto imprescindible para tratar las secuelas de una operación quirúrgica de modo rápido y eficaz. En los tejidos lesionados desempeña un papel protector, aumentando su vitalidad. Disminuye las marcas de cicatrices aun recientes.
Nota muy importante: El producto se puede aplicar directamente sobre la herida sangrienta. La eficacia del tratamiento depende de la rapidez en que se aplica después de haberse producido el daño. Cuanto antes se aplica y más fresca está la herida o el daño, más espectacular es la regeneración. Sobre todo es muy importante cubrir la zona con una gasa o paño para que no le de la luz, pues el aceite de hipérico es fotosensibilizador.
Esta es una fórmula magistral para post-operatorios o heridas:
El aceite de hipérico es muy útil en el tratamiento de pieles muy inflamadas ya que tiene un gran poder de aliviar y moderar las inflamaciones. Por su capacidad regeneradora también es útil para prevenir y tratar el envejecimiento de la piel.
Otro tratamiento regenerador anti-envejecimiento, aplicar por la noche antes de acostarse la siguiente fórmula:
Las propiedades medicinales del aceite de hipérico son:
Para concluir, siempre contar con el consejo médico, nunca auto-medicarse, nuestro médico es quien mejor nos puede guiar en cualquier problema de salud.