Taller: Tacto con tacto - el mejor ansiolitico

Nuestra realidad, nuestro pequeño universo se configura a través de los sentidos... de lo que vemos, oímos, olemos, saboreamos y sobre todo de lo que tocamos.Todas nuestras experiencias, de donde aprendemos,se realizan en función de lo percibido e interpretado posteriormente. Y todo esto se amplifica en el sentido del tacto.

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, y curiosamente el tacto es el único sentido del que no se puede prescindir, es absolutamente vital, y se extiende más allá de los límites corporales para emitir al individuo relacionarse con el medio y adecuarse a él.

Cuando somos niños tocamos todo, ese es nuestro instinto para aprender a adaptarnos.De adultos, esa maravillosa táctica la hemos casi perdido y sin ella, de alguna manera nos sentimos perdidos.

Recuperarla, tocando y sintiéndonos tocados, la ansiedad se disipa. El tacto con tacto, es decir, con respeto hacia lo tocado nos muestra como lo así percibido es agradable, amable... y ya no hay necesidad de amurallarnos, y es entonces cuando nos reencontramos; y educarnos en el tacto en el ámbito de lo cotidiano, de lo sencillo, de lo lúdico es la mejor manera de tirar a la papelera esas cajitas.

Disfruta con el tacto y sonríe.