Cómo saber si hay dobles en el árbol genealógico familiar, y como estos nos afectan.
Bien, el primer indicio son los nombres. Podemos ver como estos se heredan generación tras generación, en muchas familias es tradición poner el nombre del primer hijo o hija el mismo nombre de sus padres, así tenemos clanes, de Antonios o Antoninas, tal y como se llamaban bisabuelos, abuelos, padres, hijos y nietos, estos sufren algunos cambios, pero mantiene las raíces, de María a Marina, de Alberto a Albaro, etc.
También apreciamos que hay una cronología referente al rango entre los hijos, suelen ser el primer hijo varón o la primera hija mujer, sus fechas de nacimiento coinciden dentro de la misma quincena, en años distintos, o distan, tres o nueve meses, lo que les hace uno ser fecha de concepción del otro.
Los valores son los principios morales que guían nuestro comportamiento, es decir, los cimientos de nuestras vidas. Aquello que nos da sentido de propósito en todo lo que hacemos, pero ¿cuál es la importancia de los valores en las familias?
Un valor es una característica que se considera positiva y que se transmite de una generación a otra. Son importantes porque ayudan a definir qué es lo correcto y lo incorrecto.
Por ejemplo, si usted cree que es correcto ser honesto, entonces estará más inclinado a serlo en su trabajo y en sus relaciones interpersonales. Si usted cree que es incorrecto mentir, entonces tendrá dificultades para mentirle a sus amigos o familiares.
Últimamente existe un boom en que a todas las personas les gustaría, por lo menos, empezar a tener una buena alimentación y, sobre todo, una que trate de ser lo más beneficiosa posible. Por eso, muchas personas quizás estén pensando en hacer una dieta basada en plantas (vegana).
Todo esto es debido a que como es bien sabido, la mayoría de los nutrientes saludables las encontramos en el reino vegetal, fungi y protista, bien conocidos por sus grandes beneficios hacia la salud humana y otra de las bendiciones de una dieta basada en plantas (ABP), es que al no contener alimentos (obviamente) de origen animal, están libres de grasas saturadas y todo el riesgo que ello conlleva para la salud humana, sobre todo hablando del aparato cardiovascular. Pues bien, ya para empezar habéis leído que la respuesta a la pregunta del título de este artículo es evidentemente: SÍ.
Los científicos D. Ángel María Villar y Dña. M.ª Emilia Carretero, mencionan en su trabajo los beneficios del aceite de hipérico en el tratamiento de la depresión “de leve a moderada”.
Confirman en su trabajo las cualidades del hipérico en cuanto a “propiedades antisépticas y cicatrizantes, por vía tópica, así como astringentes y antivirales, han sido demostradas en diversos ensayos experimentales tanto in vivo como in vitro y en ensayos clínicos. Posee también propiedades antinflamatorias, antiespasmódicas y diuréticas debido probablemente a la presencia de flavonoides”.